José Montesinos lució como encestador

Cuando se hable de los mejores basqueteros de nuestra región, hay que mencionar a José “Goyo” Montesinos.

Desde niño fue muy buen jugador de beisbol, fútbol sala, voleibol, corredor, y boxeador, pero prefirió el baloncesto. Para aprenderlo, contó con el apoyo de dos de los mejores técnicos de nuestro país, los también tequeños Carlos Gil y Jesús Cordovez, aunque afirma que una buena parte de sus habilidades las adquirió jugando caimaneras en donde fuera, y casi todos los días.

Por sus destrezas como atacante, y por sus casi dos metros de estatura, fue llamado a incorporarse a las selecciones de Guaicaipuro y de Miranda, con las que jamás dejó de brillar como encestador.

“Goyo” continuó perfeccionado su juego, y lo hizo tan bien, que varios equipos deseaban contratarlo para que jugara en la Liga Especial de Venezuela. Pero una lesión lo alejó de esa oportunidad que solo se le presenta a los mejores.

Sin embargo, continuó en el baloncesto, pero en la categoría máster. Participó en la Liga Carriguai, con los poderosos Cohetes de Oportunilandia, que colmaron de emociones a los aficionados de los Altos Mirandinos, entre los años 1990 y 1995.

Luego destacó como dirigente. “Goyo” estuvo durante varios años al frente de la Coordinación de Deportes del Retén Judicial Los Teques. En esa institución se esmeró por hacerle un poco más fácil la existencia a los reclusos, organizándoles competencias entre los distintos pabellones, y luego armaba selecciones que medía, en casa, contra equipos de otros retenes.

Gracias a su esfuerzo, los muchachos de Retén Los Teques casi siempre resultaban vencedores en todas las fases de los Juegos Nacionales Penitenciarios.